22/6/10

Puras Marranadas de mi Nieto.

Era invierno a medio derretir, un poco de niebla y
un "entre" ronquido y silbido infantil que hacía vibrar su nariz.


El pequeño se quedó... ¿Cómo? Aún no recuerdo...
Pero se paró; eso sí.


Él, él era un cerdo; Contento y coqueto.
¿Valiente? ...mmm pues dependía... de la persona y el lugar,
su estado de ánimo y la dirección del viento
.
Podría decirse que hasta aveces si habían subido las acciones;
Esas gemelas eran muy flojas pa` subir el monte a traer los granos...


Se le enroscaba la cola cuando aún no comía.
Rosado por la dieta rancia que le daban.


A los 4.6 metros, si no nos falla la memoria, se le oyó la voz
arroncada por el vino al jefe:
-"Juanitaaaaa... ¡échale más granos, sino pa`cuando nos lo comemos!-

1 comentario: